Amante


La luz de la tarde entra por la ventana, colorea de ámbar las paredes y lame tu piel desnuda. Tumbada sobre mi cama, me ofreces el exquisito manjar de tu carne pálida. Mis torpes manos tiemblan impacientes y el corazón late ruidoso en mi garganta. Acerco la boca a tus labios entreabiertos y derramo mi deseo en besos cálidos. Arranco del arpa dormida notas que gimen en el silencio. Encauzo mis sentidos por tus valles frescos y por un instante pierdo mi identidad tras un pliegue caprichoso de tu sonrisa.
Robo las breves horas y las escondo en el fondo del baúl donde guardo los momentos felices.
Luego volverás a tu atalaya para dominar tus posesiones, y yo, que sólo soy el más despreciable de tus juguetes efímeros, albergaré la esperanza de tu improbable retorno.

Víctor Manuel Jiménez Andrada
Ilustración: Nicoletta Tomas Caravia (serie Amantes)

1 comentario:

Pablo Gonz dijo...

Hermoso microrrelato. Destaco la facilidad de la prosa.
PABLO GONZ